Bully en Locktober 22

Ray premia con un profundo beso a su esclavo después de quitarle el gancho y soltarle las cadenas.

Enrique se ve tan alto e imponente delante de Ray, que se ve menudo y delgado, pequeño comparado con su corpulenta propiedad.

Y sin embargo, la actitud sumisa de Enrique que mantiene las manos en la espalda mientras su Amo lo besa y la actitud dominante de Ray que le estruja las nalgas con una mano y juega con su pezón en la otra hace que la imagen se vea tan erótica y quizá un tanto ilógica.

Nunca he besado así a Ulises, en principio no estoy seguro de que a él le guste recibir besos…. Pero la imagen de mi tío es tan poderosa y excitante que se me antoja probar.

Me giro a mirar a Ulises - híncate y abre la boca- le ordeno y lo esclavo me obedece, le escupo dentro de la boca y miro mi escupitajo sobre su lengua- traga- mi esclavo obedece y miro debajo de él su verga bien parada, le escupo en la cara y Ulises cierra los ojos por instinto.

Veo mi saliva bajar por el contorno de su nariz y aprovecho para lamerlo, me arrodillo delante de él y continúo lamiéndole la cara, Ulises sonríe y su verga se pone dura.

-Pon las manos en la cabeza- le ordeno y cuando Ulises las sube le planto un beso, siento su aliento caliente que aún conserva el sabor de la pasta de dientes, sus labios delgados y sus mejillas rasposas, le meto la lengua con autoridad y Ulises la recibe lamiéndola con la suya.

Lo sujetó de las caderas y una de mis manos bajan a recorrer sus glúteos, lo escucho respirar agitado, excitado.

Ray se separa de Enrique y avanza hacia el mueble con cajones al fondo del calabozo, regresa con un enorme dildo doble. Lo engrasa con lubricante muy despacio mientras nos mira besarnos en el piso…

Disfruto ese beso más que cualquier tortura o humillación que le haya hecho sufrir a Ulises, no porque sienta amor por él sino porque de alguna manera lo he llevado hasta lo más profundo, he logrado una conexión de dominación y sumisión total con un cabrón que hace un mes se la pasaba molestándome y humillándome en la escuela… ahora era mi perra.

Ray le patea las nalgas a Ulises y Ulises se acomoda en cuatro sin dejar de besarme, de pronto su boca se abre grande y emite un gemido profundo- ahhhhhh- miro a mi tío en cuclillas detrás de Ulises metiéndole el dildo, me pongo de pie y me bajo el pantalón, mi verga está bien dura, húmeda y viscosa, excitadísima.

El calor y humedad de la boca de Ulises me arranca un gemido grande- Ahhhhh- mi esclavo me la está mamando mejor que nunca, no solo siento sus ganas de complacerme también percibo esa devoción que me tiene y que lo mueve a venerar mi falo con su boca y toda su energía.

A ratos gime con mi verga adentro y la vibración de su voz me hace cosquillas, Ray sonríe divertido abriéndole el culo con el dildo grueso que tiene en las manos. ...