Mi esclavo de gym 5

Abrí un perfil gratuito en Onlyfans subiendo el vídeo que había grabado de mi esclavo, pero las suscripciones fueron escasas al principio, por lo que decidí seguir usándole de otro modo hasta que mejoraran. Le cité mandándole éste mensaje:

-Te espero en la puerta de la Sauna Center el viernes a las 12 de la noche. Puedes vestir de calle pero lleva en la mochila arnés y suspensorio, cuando entremos te cambias y te espero en la cabina que te diga.

Entramos, se cambió como acordamos y llamó a la puerta de la cabina ordenada. Entró y le coloqué el collar de esclavo atado a la cadena y le vendé los ojos.

-Ahora saldremos y te pasearé como el perro que eres y obedecerás todo lo que yo te diga…¿comprendido, zorra?

-Lo que usted mande siempre señor…

Dicho y hecho. Salimos y le empecé a pasear por toda la sauna tirando de la cadena parándome solamente delante de los tíos que me daban morbo.
La primera parada fue delante de un chaval de unos veintipocos años que acababa de quitarse la toalla al ver que nos acercábamos.

-¿Te gustaría usar a mi perro? ¿Qué te gustaría hacerle? (pregunté)

-Menudo cuerpazo que tiene tu perro…me encantaría follarle la boca…( contestó empalmándose al momento)

Agarré la cabeza de mi puta y se la acerqué a su polla. El chico empezó a follarle la boca dándole fuertes embestidas. Cuando comenzó a jadear me acerqué a su oído y le susurré unas palabras para acto seguido tirar de la correa obligando al de gym que continuara el camino.
La segunda parada fue delante de otro tío que parecía una calcamonía de mi esclavo en cuanto a cuerpo se refería, aunque no tan agraciado de cara y con 3 o 4 años más.

-¿Quieres usar a mi puta? (volví a preguntar afirmando al segundo moviendo de arriba a abajo la cabeza)

-Sólo te dejaré usarlo si es para follarlo, pero con una única condición… pararás un poco antes de que te vayas a correr. ¿Aceptas?

Afirmó nuevamente con la cabeza colocándose detrás de mi perro para follarle con fuerza haciéndole gemir rápidamente. A los 5 minutos paró diciendo que estaba cerca de correrse.
Le susurré unas palabras al oído y sacó su polla con cara de fastidio mientras continuamos el camino parando frente a un tío guapísimo de unos treinta años muy delgado y cuerpo cubierto de pelo recortado. Volví a formular la pregunta diciéndole que me contestara al oído, comenzando una conversación con él con voz muy baja para que no escuchara nada mi esclavo.
Después de muchas preguntas y respuestas se marchó camino a los vestuarios mientras yo tiraba de nuevo de mi zorra en dirección a la cabina en la que comenzamos nuestra andadura. Abrí la puerta y allí esperaban de pie con las pollas durísimas los dos tíos que ya habían usado a mi puta. Cerré rápidamente acercando mi dedo índice a mi boca para q...