Recursos Subhumanos 8

-Límpiate la cara en el pasto- me ordenó Libardo y obedecí, luego Sam se puso de pie y me colocó un collar de perro en el cuello, los hombres presentes aplaudieron.

Libardo sujetó una correa a mi cuello y luego me llevó a cuatro patas a mi cuarto.

El sonido de las campanillas al inverso me hizo caer en un profundo sueño. Desperté en mi cama, vestido con una pijama muy caliente, otro regalo de la empresa. Miré mi buró y vi un reloj maravilloso, muy costoso, de muy buen gusto “regalo de la empresa” decía.

Me levanté adolorido y me descubrí unos golpes en la espalda que no supe explicarme porqué eran, mi boca sabía amarga, me di un baño y me lavé los dientes.

Bajé al comedor vestido con mi traje, sólo estaba Sven, ataviado como siempre con un pantalón holgado y sin camisa. Me sonrió y me ofreció una fruta.

Me senté intrigado por saber dónde estaban los demás - ayer llegó la junta directiva y las actividades terminaron muy noche- me explicó Sven, van a empezar todo al medio día, come otra fruta y nada un rato.

Seguí su consejo, al poco rato llegó Ulises que también traía marcas en su espalda y tampoco recordaba cómo se las había hecho.

-Me regalaron un reloj hermano- me dijo mostrándomelo- mira es contra agua y está precioso, es más caro que todo lo que tengo- me dijo sonriendo- vamos a ser ricos

-¿Qué vamos a hacer en este trabajo que nos pagan con ropa y relojes carísimos?- pensé en voz alta, para entonces las campanas ya habían borrado de mi memoria la entrevista, el examen médico y prácticamente toda mi actividad de fag

-Hermano, por este reloj yo daba hasta el culo- dijo haciendo su sonrisa boba de siempre.

El asiático y el negro llegaron a unirse a nosotros a la alberca, al principio nos incomodamos pero luego comenzamos a platicar amablemente. El negro se llamaba Orson y el asiático Hiro. Renán, Jimeno y hasta Libardo se metieron a la alberca y pasamos un rato divertido.

Sam y Pablo llegaron después vestidos de traje a indicarnos que era tiempo de ir a comer, y autorizándonos ir a comer en traje de baño para economizar tiempo.

La comida sirvió para conocernos mejor: Orson, Sam, Hiro y Libardo eran la junta de directores de Pablo que funcionaría en Home Office para mantener la dirección de la empresa en el País.

Cuando terminamos de comer, Libardo hizo sonar los tubos

TINTONTANTAAAN

Al sonido de la campana Yahir, Renán,Jimeno, Ulises y yo nos quitamos el traje de baño y nos arrodillamos

-Cubre la cara de este- le ordenó Pablo a Libardo señalándome- no estoy listo todavía

-Póstrate fag- me ordenó Libardo dándome una nalgada- cubre tu cara en lo que busco una máscara- lo obedecí

-Amos, lleven a sus fags para que los ayuden a vestirse y los espero en 20 minutos en la sa...