Lucio se puso de rodillas a un lado de Andrés y comenzó a echarle la crema solar, pero Andrés dio un paso más.
• Andrés: “Puedes ponerte a horcajadas, creo que es mejor”
• Lucio: “Como quieras”

Al hacerlo su polla quedó al principio sobre la espalda de Andrés, le untaba crema sobre los hombros, pero al ir bajando por la espalda él se tuvo que mover, recolocarse, y le quedó inmediatamente por debajo de las nalgas, intentó echarse la polla a un lado, pero en ese mismo momento en que se recolocó, Andrés empinó el culo, sólo un poco, pero fue evidente.
• Lucio: “Cojones Andrés, ¿no te puedes quedar quieto?”
• Andrés: “Es instintivo, lo hago casi sin darme cuenta… pero échame también por las nalgas, no te cortes”
• Lucio: “Cortarme no, pero así con el culo empinado y abierto…”
• Andrés: “Tú échame mucha crema, en las nalgas y también entre ellas”
• Lucio: “Cojones… oye ¿nunca te han dicho que tienes un ojete que más que un agujero es más bien una raja?”
• Andrés (riéndose): “Bueno, no nací así”
• Lucio: “Andrés, te veo puta”
• Andrés: “No es que me veas, soy puta y desde que te vi antes de ayer estoy muy puta”
• Lucio: “Me dan ganas echarte crema también en ese ojete y meterte un dedo o dos”
• Andrés: “¿Y quién te lo impide macho? nadie nos está viendo, casi no queda nadie en la playa”
• Lucio: “Pues toma dos dedos, porque para lo que tienes uno me parece poco”
• Andrés: “Ay cojones no sabes el gusto que me das, estar aquí al aire libre con dos dedos en el culo, además las ganas que tenía desde que te vi antes de ayer, que creo que ni te percataste de mi presencia, pero me gustaste en cuanto te vi”
• Lucio: “Ah, ¿sí?”
• Andrés (sonriendo): “Sí, fue amor a primera vista”
• Lucio (mientras seguía dedeándole): “Bueno amor, amor, no creo”
• Andrés: “No, pero sí ganas de macho y ganas de polla, porque te la he estado mirando mucho y la tienes muy buena”
• Lucio: “Creo que, así como la tengo ahora, no me la has visto, aunque sí creo que la sientes sobre ti, pero hablando de eso, mejor nos vamos para otro sitio que, aunque casi no haya nadie en la playa y los pocos que están estén lejos, estamos dando el cante”
• Andrés: “Sí, mira vamos entre esas dos rocas enormes”
• Lucio: “Ya allí te han dado otras veces, ¿no puta?”

Ambos recogen sus cosas y van en camino hacia las rocas.
• Andrés: “Sí, para que negártelo, pero no tantas, no creas, menos de las que quisiera y lo que viste que tengo no es sólo por las pollas, es que me lo trabajo mucho yo mismo cuando estoy solo para contentarme… y para tenerlo listo para cuando me encuentro un macho como tú”
• Lucio: “Pues te la pienso meter hasta los cojones”
• Andrés: “N...