Tampoco era un Amo

Llevo mucho tiempo en busca de un Amo. He estado con algun hombre que decia ser Amo, pero solo queria disfrutar de una puta como yo. Y así fue con un tío que me habló por grinder. Vio mi perfil, en el digo que soy una sumisa esperando órdenes. Eso le hizo hablarme. Se identificó como Amo. Estuvimos hablando y le gustó lo que yo le decia y a mí su actitud. Serio y firme. Me mandó sacarme fotos desnudo y mandarselas y eso hice. Le gustó, él me mandó una de su polla. Me dijo que iria a mi casa y tenía que recibirlo desnuda y de rodillas.

Llegó el día, llamó en el portal, le abrí y también abríla puerta de mi casa y desnuda me arrodillé con la cabeza agachada. Él entró y solo le veía sus zapatillas. Me mandó besárselas y eso hice. Después me dijo que se las quitara y besará sus pies. Llevaba calcetines negros. Se los besé y me mandó quitarle los calcetines y que le besara los pies y eso hice.

A continuacion, me ordeno ir a la habitación. Yo me levanté y lo guié hasta la habitación. Me dijo que lo desnudara. Ahí fue cuando lo vi. Era un tío de 50 años, grueso, con una cara cuadrada y muy serio. Su polla era de tamaño mediana y gruesa.

Una vez desnudo, se acostó en la cama y me mandó que también lo hiciese. Al acostarme cogió unas pinzas de metal y me las puso en mis huevos. Sentí un dolor intenso pero se mitigó cuando me ordenó que le comiera la polla y los huevos. Eso hice, con toda la suavidad ya que deseaba que mi Amo gozara. Mi lengua pasaba por sus huevos y después iba a su polla, y poco a poco la fui metiendo en mi boca hasta que se puso muy dura, entonces me mandó tumbarme en la cama boca arriba. Él se puso encima y me mandó que le comiera el culo, mientras él con una mano se pajeaba y con la otra tensaba las pinzas de mis huevos. Cada vez que tiraba de ellas yo me retorcia y él me daba una palmada en la barriga.

A mí me encantaba y a él también hasta que se corrió sobre mi barriga. Se levantó, me quitó las pinzas y me mandó ir al baño. Fui, me mandó ir a la ducha y me mandó arrodillarme. Y de su polla salió una meada que cayó sobre mi boca. Yo abrí la boca y me tragué su meo. Que delicia, beber el meo de mi Amo.

Al acabar, se vistio y se fue. He vuelto a hablar con él, pero no he vuelto a quedar. Pero bueno esa es otra historia