Diario de un Gymbro 3

🏋️‍♂️ Diario de gimnasio — Lunes 19/02/2017

14.12
PUTA PUTA PUTA PUTA!!!!!! SOY PUTO SUBNORMAL JODER!!!!!
El puto Juan Carlos, profesor de inglés se ha puesto de baja. No los ha comunicado la tutora a primera hora.
—Chicos Juan Carlos nos avisó el viernes a última hora de que cogía la baja por un asunto personal y privado.
Pero tranquilos que ese mismo viernes ya conseguimos un nuevo profesor y hoy empezareis con él. Clase os presento… —se abre la puta puerta …— a Rafael Gómez.
ME CAGO EN MI PUTA SANTA VIDA…

16.05
Vale Luca relájate.
Noto que aún el corazón me va a mil, pero voy a intentar escribir lo sucedido.
Cuando Rafa ha entrado he tenido muchos sentimientos al mismo tiempo. Quería que la tierra se me tragara. He sentido miedo y ansiedad. Era como si me hiciera muy pequeño, casi lo he hecho apropósito para poder desaparecer. Sabía que de ahí nada iba a salir bien. Pero también, joder, se me ha puesto dura. Estaba imponente, pero cambiado. Llevaba unas gafas negras de pasta que le daban un aire serio pero elegante y muy sexy, un jersey granate con los cuellos de la camisa azul cielo saliendo por arriba. Y unos pantalones negros pitillo que se ajustaban a las fuertes piernas que tanto me ponían.

Durante los primeros 5 minutos en los que se presentó pensé como un gilipollas que igual no me reconocía, pero cómo no lo iba a hacer. Según nos pidió presentarnos miró uno a uno para decidir por quién empezar y entonces noté ese gesto. Uno que se debía parecer mucho al que yo tenía, aunque pronto se volvió levemente enfado. Intentó disimular claro, y creo que lo consiguió pues nadie dijo nada.

—Empecemos por ti, el de la camisa blanca— dijo señalando a mi compañero de al lado.

Todo estábamos sentados por parejas y el cabrón eligió a mi pareja obligándome a sentir que yo iba a ser el siguiente.
Mario, mi amigo se presentó y después me señaló a mí.

—Sigues tú? Cómo te llamas?

Lo hizo en el mismo tono que se lo preguntó a Mario, pero noté cierto rencor en su tonalidad que otros no notarían.

—Me llamo Luca— dije aclarándome la garganta tras notar que me salía un hilo de voz.
— Ciclarse le encoge los huevos y le sale esa vocecita, profe

El vacile de Sergio el gracioso de clase resonó por las paredes y muchos empezaron a reirse.

—No me ciclo, capullo. Ya quisieras tener mi puto bíceps— respondí automáticamente para imponerme.
—Vosotros dos— dijo Rafa en un tono amable— si vais a poneros chulos en mi clase más os vale hacerlo en un perfecto inglés, si no me enseñareis el camino al despacho del director. ¿Está claro? —dijo cerrando la pregunta con ese tono que había usado en la ducha para obligarme a que se la comiera.

Mi polla dio un golpe enorme y se puso durísim...