Como mi padrastro y su hijo comenzaron a usarme a los 20 años.

La respuesta de mi padrasto fue la siguiente; "Claro que mi hijo Gaspar será tu Rey, pero dependerá exclusivamente de vos ganarte la magia" La frase me hirió como herida necesaria, sobre todo por el tono fuerte de la voz. No entendí nada, en el momento, lo que decía y significaba la frase, o tal vez, lo entendía todo. Estaba felizmente confundido, estaba como sabiendo que finalmente se daba completo lo que siempre quise, ser esclavo, pero además, un gran plus, una ganancia inesperada. Quienes me dominarían sería dos, el padre y su hijo de veinticinco años. Y algo más, rápidamente me daban una frase que con más tiempo,terminaría por comprender, luego de analizarla con rigor.
Ese tiempo que tardó en llegar Gaspar, lo pasé solo, porque Horacio, después de imponerme esas palabras, salió a comprar cigarrillos y no volvió (hasta el momento oportuno)
Vino Gaspar, cuando abrí la puerta, quedé sorprendido por su belleza física, pero más aún porque doblaba en brillo de sus ojos a su papá, Horacio, mi padrastro. Después del "hola quien sos vos" entró con decisión, se sentó en el sillón grande y estirándose con esa libertad salvaje de quien sabe que es dominante.... me pidió que le sirva una cerveza, o más bien, supo exigirmelo. Y yo obedecí, humillado un poquito, feliz bastante y sobre todo con gran esperanza de humillación y felicidad mayor. Vendría, más ráido de lo que yo mismo soñaba, en pocos minutos luego de la cerveza, viene eso inolvidable y mucho tiempo soñado y cumplido en exceso.
Recibí el placer y el dolor unidos, supe quien sería de ahi en adelante.