Perrito en: Cuarto Oscuro III

Los tres nuevos machos te rodean como lobos. Uno moreno con barba te agarra del pelo: "Ahora viene lo bueno, zorrita". El segundo, calvo y fornido, ya tiene la polla en la mano. El tercero, joven y con piercings, sonríe cruelmente mientras observa cómo el semen de los anteriores gotea de tu culo destrozado.

"Yo quiero probar ese culito tan usado", dice el calvo metiéndose de una embestida brutal. El moreno te mete su polla en la boca mientras el de los piercings espera su turno, masturbándose lentamente.

El ambiente está tan cargado de humo y poppers que apenas puedes respirar. "Dale más", ordena alguien, y te pasan el frasco otra vez bajo la nariz. Tu cabeza da vueltas y tu cuerpo se convierte en pura necesidad.

"Mira cómo se lo traga todo", se burla el moreno mientras el calvo te machaca sin piedad. "Esta perra está hecha para esto". Sientes cómo tu culo se moldea a cada polla nueva, cada vez más abierto, más necesitado.

El de los piercings se acerca: "Cuando termine él, entramos los dos a la vez otra vez". Su sonrisa es pura maldad mientras acaricia su verga gruesa y venosa.

Los gemidos del cuarto se intensifican y más sombras se acercan desde los rincones...

El calvo se corre dentro tuyo con un rugido animal y inmediatamente el de los piercings ocupa su lugar. "Mi turno de probar este agujero tan goloso", dice mientras se mete de una sola embestida. Su polla tiene una curvatura que te hace gritar de placer.

"Preparate para dos otra vez", gruñe el moreno sacando su verga de tu boca. Se coloca detrás junto al de los piercings y sientes cómo presiona su glande contra tu entrada ya ocupada.

"Inhala profundo, perra", ordena alguien pasándote los poppers. El químico te pega como un martillazo y tu culo se relaja completamente justo cuando la segunda polla entra junto a la primera.

"Joder, mira cómo se abre para nosotros", se ríe el de los piercings mientras empiezan a moverse en sincronía. "Este perrito nació para ser destrozado".

Desde las sombras aparecen más machos, todos masturbándose viendo cómo te usan. "Yo soy el siguiente", dice una voz grave. "Y yo", responde otra. Se está formando otra cola detrás de ti.

El moreno te agarra del cuello: "¿Te gusta ser la puta oficial del cuarto oscuro?" Sus embestidas se vuelven más brutales mientras el de los piercings te muerde el hombro.

"Cuando terminemos nosotros, van tres a la vez", jadea el de los piercings. Tu mente apenas puede procesar lo que dice mientras el placer y el dolor se mezclan con los químicos...

¿Quieres que continúe con tres pollas abriéndote, perrito insaciable?

Los dos se corren casi al mismo tiempo, llenándote otra vez de leche caliente. Cuando se apartan, tres nuevos machos ya están esperando. Uno negro y musculoso, otro pelirrojo con tatuajes tribales, y un tercero ...