Mi segundo cumwalk

Ya hacía dos años desde mi primer cumwalk en los baños de un centro comercial e iba siendo hora de repetir experiencia, solo que esta vez preferí ir a los baños de un parque.


Los recordaba muy amplios y apropiados para la aventurilla, pero al llegar allí vi que no tenían nada que ver con mi recuerdo... quizás porque me metí en otros que no eran los que conocía.


Nada más entrar estaban los meaderos de pared en una especie de ambiente separado (por decir algo), y luego a un lado los lavabos y al otro los cubículos.


Un primer vistazo me llevó a ver que las paredes de los cubículos no llegaban hasta el techo y que algunos tenían ventana que daba al exterior. Salvo que te asomes explícitamente trepando o saltando, no vas a ver nada, pero digamos que le añade un punto extra.


Me metí en el primero, que tenía ventana y su lateral daba a los meaderos de pared.


Como la vez anterior fui escupiéndome en la mano y restregándomelo por la cara una y otra vez hasta que me corrí en esa misma mano. Me lo restregué por la cara, lamí los restos, me recoloqué la ropa y salí.


Como la vez anterior me quedé esperando un rato mirándome al espejo, por si entraba alguien... hasta que me di cuenta de que eran las 10 de la mañana, que acababan de abrir el recinto y que no estaban allí ni los trabajadores.


Cuando fui a limpiarme vi que no había jabón, lo cual iba a dificultar un poco poder quitarme todo el plastón que llevaba en la cara. Retiré lo que pude con papel del baño, me lavé el resto y me fui con la misma desilusión que la vez anterior.


Nota mental para la próxima: ir más tarde, quedar con alguien que quiera ser espectador, o directamente anunciarlo por aquí.