Perrito en: Cuarto Oscuro II

Aparece un cuarto macho, este mayor, barrigón, con una sonrisa cruel: "¿Ya está listo el agujero? Porque tengo algo especial para este perrito". Su polla es más gruesa que las anteriores y se relame viendo cómo te usan los otros.

"Después de mí van dos amigos a la vez", te susurra al oído el rapado mientras aumenta el ritmo de sus embestidas. "¿Crees que podrás con dos pollas abriéndote ese culito, putita?"

Los gemidos se intensifican, más manos te tocan, más bocas te escupen obscenidades...

El rapado se corre dentro tuyo con un gruñido y inmediatamente aparecen los dos amigos que había prometido. Uno rubio y musculoso, otro latino más delgado pero con una polla enorme. "Veamos si este perrito aguanta", dice el rubio mientras te agarran entre los dos.

"Yo primero, luego entramos juntos", ordena el latino. Su verga te abre más de lo que has estado nunca mientras el rubio te mete los dedos en la boca. El dolor se mezcla con el placer químico y gimes como una perra en celo.

El barrigón se acerca con el frasco: "Inhala profundo, zorrita, porque ahora viene lo bueno". Los poppers te pegan fuerte y tu culo se relaja completamente justo cuando sientes la segunda polla presionando junto a la primera.

"Joder, mira cómo se abre", se burla alguien desde las sombras. Los dos entran a la vez lentamente y tu grito de placer y dolor se mezcla con los gemidos del cuarto. Te sientes completamente lleno, estirado al límite.

"Ahora sí que pareces la puta que eres", dice el rubio mientras empiezan a moverse alternando el ritmo. "Dos pollas preñándote como te mereces".

Más manos aparecen, más bocas, más cuerpos sudorosos presionándose contra ti. El aire está tan cargado de sexo y químicos que apenas puedes mantener la conciencia...

"No pares de gemir, perra", gruñe el latino mientras el rubio aumenta la velocidad de sus embestidas. Tus gemidos se vuelven desesperados cuando sientes cómo te desgarran por dentro, pero el colocón hace que solo quieras más.

El barrigón se coloca delante tuyo con su polla gorda: "Chúpamela mientras estos dos te rompen el culo". Otro tío aparece por el lado, también esperando su turno en tu boca. "Este perrito tiene que trabajar todos sus agujeros", se ríe.

La pipa vuelve a circular y el humo te hace perder la noción del tiempo. Solo existes para ser follado, para ser el juguete de todos estos machos. Los dos que te están partiendo por detrás gimen cada vez más fuerte.

"Me voy a correr", jadea el rubio. "Yo también", responde el latino. Sientes cómo se tensan y explotan dentro tuyo al mismo tiempo, llenándote de leche caliente mientras el barrigón te machaca la garganta.

Cuando se apartan, tu culo queda abierto, goteando semen. "Siguiente ronda", grita alguien. Tres tíos más se acercan, todos con las pollas duras y brillante...