Recursos Subhumanos (Final)

Ha pasado mucho tiempo desde entonces, ahora, vestido como colegiala estoy delante de Sam y de Pablo, los dos hombres más importantes para mí en esta empresa.

Ulises y yo permanecemos sobre el sillón con las nalgas al frente y los pechos recargados en el respaldo.

-¿Cuál te vas a coger primero?- pregunta Sam a Pablo

-Voy a probar a Hugo, claro- dice Pablo riendo- me enoja pensar que pude tener mi fag personal desde la universidad y lo dejé ir

-Adelante, todo tuyo- dice Sam, siento algo extraño en su voz y reconozco ese tono ladino del empleado que consciente al jefe… Sam me está ofreciendo como si ofreciera un regalo a Pablo para quedar bien con él.

-Pero lo quiero humillado- dice Pablo- más humillado todavía- luego añade- de pie Hugo- me levanto y me quedo delante de Pablo mirando al piso

Pablo se sienta en un sillón unitario de la sala delante de mi- ponle un par de pinzas en los pezones- le ordena a Ulises que de inmediato va al calabozo y regresa con dos pinzas de metal unidas por una cadena delgada. Sam me ha puesto esas pinzas en varias ocasiones… duelen porque están muy apretadas.

Ulises me pone con diligencia las pinzas en los pezones y yo jaló aire para aguantar el dolor… pero le muestro mi ansiedad a Pablo para que mire cuánto me duele, Pablo sonríe y se rasca el pantalón en la entrepierna.

Se lo baja completo, su verga está bien parada, se vuelve a sentar con su verga mirando al techo - bájate lentamente la tanga y déjala caer al piso- obedezco, sobra decir que con la falda y las medias me siento como la más femenina de las putas.

-Ahora la falda princesita- me arde en el orgullo que mi ex compañero de universidad me llame así, pero me bajó la falda despacio, muy despacio…

-Ven lentamente caminando hasta mi- me ordena cuando la falda cae al piso, camino despacio, mis piernas aún tienen las medias blancas, mi verga está en castidad y no me había dado cuenta pero chorrea precum hasta el piso

-Empálate en mi verga perra- me ordena y me giro sosteniendo su verga en mis manos, Pablo se moja la mano y me embarra saliva en el culo, luego se escupe en la verga. Dirijo la punta a mi coño, levanto unos segundos la mirada y veo el culo de Ulises aún expuesto sobre el sillón y a Sam de pie, con las manos en los bolsillos, disfrutando de la escena.

Me meto la punta, no puedo dejar de pensar en todas las pedas, las fiestas, las charlas que cuando jóvenes Pablo y yo tuvimos en la universidad… ahora todo eso queda atrás… ya no somos iguales… su verga me va entrando lentamente, gimo un poco de placer, placer…. Placer… su verga se mete hasta el fondo y me quedo unos instantes quieto tratando de asimilar que soy la puta de mi ex compañero.

-Muévete putita, sácame la leche… dame placer- me muevo arriba y abajo, miro mis medias que me recuerdan que s...