Cerveza, fútbol ( Español-Barca) y buen rollo de complicidad entre machos que saben la tecla que les une.
- ( teléfono) -Qué pasa Manu?
- Pues en el curro, Pechugón. Estoy solo esta semana. Vente a casa esta noche y vemos el partido.
- Pues, sería buen plan Manu. Pillo un pack de birras y corto algo de jamón y vemos.
- Hecho, me comes la polla y plan perfecto.
- Hijoputa que eres Manolico! . Prepara algo de picar. Salgo del curro, me ducho y voy.
- Ok.
Quedamos en el piso de Manu, llegué y estaba hablando por el teléfono en gayumbos con su mujer, la cual estaba de Erasmus en Polonia; el cabrón me saluda tocándose el rabo. Preparamos el salón y TV de plasma de 55 pulgadas.
Manu se fue a la ducha y en silencio, casi en penumbra vimos la primera parte del partido. Tras ello, fui al baño y encontré rebuscando en el mueble un dildo grande y un plug. Casualidad!!!

( Manu y yo llevamos años con una relación cordial de amistad, ambos casados pero con pajas en común y alguna quedada entre tíos)

Vuelvo al salón y no me aguanto la risa. Se queda con cara de pan y me pregunta qué cojones escondo en la camiseta. Se tira a mí y me arranca el plug y el dildo. Te va jugar ehhhh?
- Eres un cotilla Viktor, es de mi chochete. Se lo regalé el año pasado.
- Los probaste? Le pregunté.
- Me mira, se ríe y me dice: " Tú hubieses hecho igual que yo venado".
- Es cierto. Te propongo un plan. Si gana el Barça te abro el culo. Si pierde y gana tu Español, me lo abres tú. Con cariño!!
- Trato hecho, choca el " rabo", voy por unas birras al frigo y vamos cada uno al baño a limpiar ese culito. Quedan 7 minutos para la segunda parte.
Fui por las birras y traje un calabacín y una zanahoria que coloqué debajo del sofá. Brindamos, nos reímos, varios puñetazos en los hombros y pecho entre ambos y sobada de paquete antes de tirar a los baños a limpiarnos el culete con cuidado .

La 2a parte del encuentro fue más distendido, ambos buscábamos calor y cachondeo en el sofá. Tocábamos la flauta, un lametón, Manu boceaba al televisor, unos uyyy!!! ante los tiros a puerta, mi dedo buscaba su agujero entre risas y él ante los repullos que tomaba del encuentro, comprimía glúteos y cerraba ojal... Los de Manu perdían y eso significaba abrirle el culo a mi colega sin piedad.
La última petición de Manu a 3 minutos antes de terminar fue que le comiera el rabo, me negué, retocé mientras presionaba mi cabeza pero lo hice con gusto. Hubo tensión y cabreo de su parte en el encuentro, su acordaba del árbitro, de las peleas previas, de L. Yamal y de toda Cataluña. Bajo sus pantalones cortos su rabo gordo y recto se balanceaba y su buen capullo mojadito me decía , cómeme.

Terminó el partido e hicimos realidad nuestro plan. Nos quedamos desnudos, sobre una manta en el suelo. Le comí el culo como no lo había comido ...