Despues de tragarme toda la leche de mi primo, esa noche con el culo bien calentito dormi como un rey, ni siquiera me hice una gayola.
A la mañana siguiente mi primo me dijo, prepárate que vamos a pasar un rato en la playa con mi amigo Dario.
Me llevaron a una playa de rocas naturista, de la que uno se pone en bola picada.
Le dije, primo no pensaras que me voy a desnudar aqui, respondió relájate cabron.
Instalamos las toallas y mi primo Ernesto y su amigo Dario se quedaron en bolas.
Joder si la polla de mi primo era grande, nunca había visto algo semejante como la de Dario, media por lo menos 24 cm, y con buen grosor.
Parecía mulato de polla.
Yo que no me había pajeado la noche anterior me dejé puesto el bañador, ya estaba semi empalmado.
Me tumbe sobre la toalla boca abajo para disimular.
El cabron de mi primo empezó a contar a Dario lo que hicimos la noche anterior con todo detalle, que me cogió de los huevos, me azotó como una nena y me metió su polla en la boca.
Dario dijo quiero ver su culo, ¿sigue con marcas? Preguntó.
Mi primo dijo, no sé, ¿lo averiguamos? Se levantaron los dos a la vez, uno me agarró de las manos por detrás de mi cuerpo y el otro me bajo el bañador.
Cabrones les dije, pero ya estaba en bolas en medio de la playa.
Dario dijo. Joder no se ve ni una marca, eso es que fuiste muy blando con el, si quieres luego vamos donde las dunas y le zurramos entre los dos.
Ni hablar cabronas aquí en la playa y que me vea más gente.
Darme mi bañador les dije, Ernesto, cuando te lo ganes, no sea puto le solté.
Te lo quieres ganar o no, ¿qué tengo que hacer? vente a 4 patas y nos comes el rabo por turnos.
Al oír esas palabras se me puso la polla tiesa del todo.
Aquí no, que pasa gente.
Dario dijo tranquilo es una zona gay, van a disfrutar del espectáculo.
Replique no cabronas.
Ernesto tu verás si quieres recuperar tu bañador.
El morbo era tanto que mi polla babeaba a chorros, me puse a caminar a 4 patas hasta Ernesto y Dario, empecé por la polla de Ernesto, esa me cabía bien en la boca y luego fui a por ese bicharaco de polla, joder que pedazo polla, me atragantaba, tan grande y gruesa.
Además con sabor a meao, no la tenía muy limpia que digamos, de hecho Dario dijo, limpiamela bien que la tengo cerdaca.
Tuve unas cuantas arcadas pero le limpie el sabré a fondo.
Yo estaba salido como un perro no solo por las mamadas sino por los mirones que se acercaban y se la meneaban mientras tomaba biberón el bolas a 4 patas.
Ernesto no se quiso correr, dijo me reservo para luego, Dario si se corrió en mi cara, no veas la cantidad de chorros y de leche.
Ahora devolverme mi bañador, Ernesto dijo, no primo, aún no te lo has merecido, te vamos a llevar a las dunas.
Respondí no seas cabron, aquí no quiero que me zurres.
Mi primo se levantó y me agar...