Este relato lo escribí hace tiempo:

Tras un fin de semana arrestado en el cuartel uno tenía ganas de liberarse un poco y salir a tomar algo con los compañeros y así fue, además aprovecharíamos para ir a un sex-shop a pillar algunos juguetes para usarlos con un compañero que se iba a casar. Íbamos buscando lo típico, unas esposas, algo de ropa interior morbosa cantosa para dejarlo esposado así delante de la casa de su futura señora.

Yo iba rapado al 1, con mis tejanos ajustados, mi chupa bomber alpha plateada, y mis zapas de dos muelles negras, con el cinto de cuero ancho blanco así muy pokero, ya que después saldríamos a ver que caía esa noche.

La cosa no salió como esperamos ya que los capullos de mis colegas les daba palo entrar en aquel sitio en el barrio de chueca, que no que querían hacerle la broma ya que ninguno quería ir a pillar las esposas.

Yo dije que iría yo a buscarlas, le dije nenazas puritanas y en esto otro de mis compis se animo y dijo que me acompañaría él. 

Los demás se quedaron en la cafetería allí en Gran Vía, cruzamos y tras caminar un poco encontramos el lugar, era chulo y me encendía porque se veía cada aparato para bdsm.

Entramos y la verdad aquello era algo lúgubre había cabinas, zona de videos, y donde se vendía el material. Tenía curiosidad por ver que películas porno ponían y le dije a mi compañero que iba a bajar a las cabinas para hacerme un pajote que iba algo reventón, el se quedo mirando las esposas y unas mordazas. Al oído le dije que se dejara de comprar mordazas que tenía un rollo de cinta americana verde en la taquilla de las últimas maniobras.

Tras lo cual rascándome el paquete me tire para la planta de abajo, donde se mezclaba el olor de lejía con el de perfume. Me metí en una de las cabinas y comencé a dar a los números para ver las pelis, así me pase todas las que había puesta hasta que llegue a una que joder que pasote un tío así chulo sentado en la moto y unas tías sobándole todo el nabo y mamándosela joder me estaba calentando bastante, me desabroche el cinto y los botones de la bragueta, me metí la mano por dentro de mis slip y joder como estaba mi morcilla toda peleona queriendo liberarse. Seguí mirando y joder otro video aun mejor tenía dos pibas a un tío solo con el jockstrap de cuero atado la cama, amordazado con uno mordaza de bola roja, le sobaban hasta que llegaba un tío las pagaba y las mandaba a su casa, el argumento era que las había pagado para que lo redujeran y embaucaran para atarlo, así tenia vía libre para follarselo.

Joder me puso esa situación, pensé quién fuera ese tío joder.

Tras un rato me corrí y la verdad salpico un poco la pantalla y tal pero con una servilleta lo medio recogí. Salí de la cabina y me encaminaba a la puerta pero justo como aquello era tan oscuro para no fuera muy público me confundí y tire ...