Despierto en mi cama mareado y con un dolor de cabeza como si estuviera crudo, mi boca tiene un sabor inconfundible a lefa, estoy casi desnudo, solo tengo puesto un suspensorio roto por uno de los elásticos, mi cuerpo se siente viscoso, al incorporarme noto una sensación de dolor en mis nalgas y dentro de mi ano arde como nunca me había pasado antes, volteo a ver mi alrededor, hay unas cuerdas colgando del respaldo de mi cama, en el suelo hay condones usados pero ninguno relleno, escucho un grito.

-Andrián, es la tercera y última vez que te llamo.

Es la voz de mi amo, a ese hombre le debo todo, cuando mis padres me corrieron de mi casa por ser homosexual hace un par de años fue el único entre todos mis supuestos amigos y familiares que me recibió, prometí en pagarle por mi estancia pero el dinero se me acabo al tercer mes, ni siquiera tenía para comer, fue entonces que me hizo la propuesta que me aseguraría pan y techo a cambio de ser su esclavo.

Acudo a su llamado lo más rápido posible salí de mi habitación y me dirijo a la estancia donde se encontraba con un fajo de billetes en sus manos.

-Mira esto perra, de saber que tantos pagarían por tu culo habría cobrado al doble.

Flash back:

Acabo de complacer a mi amo cuando me levante de la cama para seguir con los deberes domésticos antes de irme a dormir cuando mi amo me detiene jalando de la cadena que siempre tengo sujeta en el cuello.

-Sabes con los ejercicios que te he dejado tienes un cuerpo y culazo que seguro pagarían por usar ¿Qué dices, te dejas vender el culo a cambio de unos días libres?

No creo lo que me dice, supuse que era solo algo hipotético con lo que fantaseaba así que solo respondo

–Como usted desee amo

A la mañana siguiente mi amo me espera con algunos artefactos sobre una mesa y una cámara digital

Fin Flash back

No se que decir a mi amo, entre el agotamiento de mi cuerpo y el peso emocional de saber que había vendido mi cuerpo como una zorra no me dejaba concentrarme en las palabras que salían de su boca.

-Responde mi pregunta putita ¿cuál disfrutaste más?

Al escuchar su pregunta trato de hacer memoria.

Flash back:

Acaba de irse un oficinista moreno con cierto grado de sobre peso, escucho como se despide de mi amo y este último entra en la habitación.

-Que buena vista es esa, tu culo bien expuesto y completamente indefenso, seguro que ese gordo solo de esta manera podría tener sexo.

Exclamó mientras empezaba a desatar mis piernas que estaban sujetas a la cabecera de mi cama junto a mis manos, dejándome perfectamente dispuesto para ser usado como un juguete sexual, pero los próximos clientes no tienen pensado usarme así por lo visto, una vez desatado me dirijo a la ducha, limpio lo mejor que puedo el sudor y saliva del segundo cliente que teng...