EL MEJOR PADRE: 7. La Iniciación.

Era noche de viernes y Alfonso y Luis estaban cenando en casa.

- Alfonso: “¿Luisito tienes algún plan para mañana?”
- Luis: “Bueno papá, no sé si saldré con unos amigos a la discoteca”
- Alfonso: “No, hijo, me refería durante el día”
- Luis: “No papá, ni siquiera iré a la piscina, es sábado”
- Alfonso: “Te lo preguntaba porque me ha llamado Roberto, sus padres tienen a unos parientes en casa y me dijo que se sentiría más cómodo aquí con nosotros, yo mañana tengo un evento patrocinado por el ayuntamiento y estaré de vuelta como pronto a las 4 de la tarde. Llegará temprano por la mañana pero no sabe exactamente la hora, por eso quería pedirte que estuvieras, ya sabes que tiene confianza para andar libremente por casa, pero quería que comieran juntos y le atendieras en cualquier cosa que pudiera necesitar”
- Luis: “No hay problema papá, estaré todo el tiempo en casa, dile que si llega muy temprano y no le abro que me llame al móvil no vaya ser que esté dormido y no oiga tocar a la puerta”.
- Alfonso: “Gracias Luisito”.

Sábado, 8.30 de la mañana.

Luis despierta al oír simultáneamente su móvil y el timbre de la puerta. Recuerda que venía Roberto y se levanta y va inmediatamente a abrir la puerta casi sin terminar de desperezarse.

- Roberto: “Hola Luisito”
- Luis: “Hola Roberto, pasa”
- Roberto intencionalmente le echa una evidente mirada de arriba a abajo: “Creo que te he levantado de la cama”. Luis estaba solo con unos boxers blancos que tenían doble tela por delante pero que trasparentaban mucho por detrás, dejándole ver a Roberto una imagen estupenda del culazo de Luis.
- Luis: “No pasa nada, ya sabía por mi padre que venías. Ahora perdóname un minuto que me estoy meando”. Luis entra en el baño y sin cerrar se baja los boxers y empieza a orinar. Se sorprende cuando ve a Roberto en la puerta del baño y se ruboriza al darse cuenta que aún tenía una buena erección matinal.
- Roberto: “No te cortes, es normal que te despiertes empalmado. Además tenemos confianza, ¿no? Lo que sí me llama la atención es como has cambiado, se nota que ya no eres un niño y quizás la natación también te haya ayudado a desarrollar un cuerpo tan espectacular, además perdona que te lo diga pero tienes un culo estupendo, no sé si se veía mejor a través de las transparencias del boxer o ahora que lo tienes bajado. Bueno creo que me quedo con esta imagen de ahora, se te ven unas nalgas tío que hay que felicitarte”.

Luis se quedó en una pieza, aún no estaba completamente despierto y no se esperaba nada tan directo, tardó unos segundos, pero luego prevaleció su vanidad.

- Luis: “Gracias Roberto, la verdad es que me gusta mi culo, y me gusta que guste”.
- Roberto: “¿Me dejas vértelo mejor? Mira si no te importa vámonos delante del espejo del arma...