Como dice el título, tanto mi tío como yo somos del mágico y maltratadísimo continente cuna de la humanidad; como se hace en estos relatos voy a describirme. Me llamo Inocencio, soy un chico de 1.76cm de altura, 70kg de peso, cuerpo normal y ojos negros azabache, tengo 18 años. Mi tío también se llama igual, es un macho de 37 años, de cuerpo normal, con panza, amante de las mujeres que se folla a todas horas y en todos los lugares hasta en nuestro huerto.

Yo siempre supe que era bisexual y que me enloquecía mi tío Ino, lo espiaba cuando se pajeaba, cuando se bañaba, cuando traía mujeres a cogerlas en casa…

Un día (hace un mes), me pilló viendo una de mis muchas películas porno bisex, yo estaba solo en casa pajeándome y metiendo una vela en mi ano (como acostumbro hacer cuando todos duermen). Mmmmm que rico sentía, cuando noté en mi espalda un golpe que me bajó de las nubes en las que estaba, y empezó como era de esperar a cagarse en mí y dándome golpes:

Mariconazo, eres una mierda, chupa pollas, fuera de mi casa… Ufffffffff solo él sabe cuanto dijo, pero me percaté de que su bulto estaba creciendo, entonces me armé de valor y lo toqué, me dio un puñetazo, pero yo no desistí quería que me follara en ese momento, sentía que esa era la ocasión.

Aturdido en el suelo por el golpe, percibí el rico olor de una polla, una polla negra bien grande, de unos 23cm, bien gruesa (la mía es de 19cm), me dijo chupa puta que se que siempre me espías y te pajeas viéndome follar a tías… no lo dudé más y comencé a chupar esa polla con la que siempre soñé, me sabía a alcohol y a líquido pre seminal porque según me contó en la mañana se quería coger a una mujer que lo calentó, pero se fue dejándole empalmado, en mi interior dije: que suerte, gracias a esa puta yo estaba chupando una polla de macho y no una vela. MI tío comenzó a darme con su polla en la boca, mientras me decía: que rico la comes, maricón, eres mejor que una nena y demás cosas subidas de tono, yo me sentía orgulloso de darle ese placer a mi macho.

Con un movimiento brusco me levanta y me pega otra cachetada, no se imaginaba lo que me ponía eso, me dijo ahora te vas a enterar, me llevó en sus brazos a su habitación en el último piso de la casa, me dejó bruscamente en la cama, me arrancó el bóxer que llevaba y me dijo: te voy a partir el culo como la puta que eres, mi polla estaba tiesa y necesitada de cariño y pensé que no me la tocaría, pero me sorprendió ver a mi tío dándome una mamada magistral como si lo hubiera hecho varias veces, me chupeteaba el glande y masajeaba los huevos, mmmm no pude aguantar más y me corrí abundantemente por la excitación y el gusto de que fuera mi tío el que me llevó a lo más alto.

Me levantó las piernas y comenzó a comerme el culo, mmmmm, metiéndome la lengua hasta el fondo, haciendo circulitos como en las películas que rico...