Mas meos

Escrito por: suvasallonuevo

Sábado, dos y media de la tarde, estoy comiendo y suena el whassup. Es mi Amo que me dice:

• Perro, a las 4 te quiero aquí.

• Sí señor, estoy comiendo, en cuanto acabe me ducho y vengo.

• Perfecto perrete, si puede llegar antes, mejor. Ya me estoy meando y voy a aguantar para ti, quiero ver si eres capaz de tragar toda una meada de verdad...

• Gracias señor, será un placer para mi. - Así que me apreso para terminar de comer, me ducho rápidamente y salgo de casa camino la suya. Al llegar, me hace subir, me entra en la habitación y me dice:

• Ya sabes cómo te tienes que poner perro, ahora vuelvo. - Me apresuro en desnudarme, extiendo mi camiseta en el suelo, me pongo de rodillas con las manos atrás y espero que vuelva mi Amo. Al cabo de un rato él vuelve. Coge una cadena, la pone en mi cuello a modo de collar y la cierra con candado.

• Abre la boca perrete, vamos a ver de qué eres capaz. - Y suelta una meada larga y tendida, se nota que hace rato que no mea, pero yo me la trago toda sin problemas. Tenía sed de los meos de mi Amo, llevaba dos semanas sin probarlos y estaba ansioso para hacerlo.

• Muy bien perrete, se nota que has estado practicando. Los meos de cuántos te has tragado?

• Sólo los míos señor, como usted me mandó.

• Y de nadie más?

• No señor.

• Muy bien perrete... Anda levántate. - Me quedo sorprendido por qué sé que no le gusta que esté de pie, pero obedezco sin decir nada. - Cierra los ojos y ni se te ocurra abrirlos. - Y así lo hago, faltaría más.

Con estas noto que coge mi polla y empieza a atarla con un cordón. Mierda, pienso yo, otra vez, con lo poco que me gusta esto. Procuro no quejarme mientras va atando, aunque me molesta y me duele. Al terminar me hace ponerme de rodillas otra vez.

• Hoy te vas a correr dos o tres veces, entendido? Y la primera será ya. Pajéate! - Me ordena. Así que empiezo a pajearme con los huevos y la polla atados. A cada zambombada me duele el cordón pero yo sigo sin parar. El dolor empieza a asfixiar mi polla, haciendo que ésta se baje aunque no pare de menearla.- Tienes 5 minutos, si no lo sacas te voy a atar, tu mismo. - Anteriormente yo ya había dicho a mi Amo que poco me habían atado, que es un tema que me atrae, que me gustaría probar, pero que me da un poco de respeto, así que me esfuerzo y concentro para sacar la leche.

• Que pasa perrete, te corriste esta mañana?

• Sí señor.- No tenía previsto verlo hoy y...

• Pues te jodes! Jajajajjaja.- Yo sigo con lo mío y cada vez mi polla está mas blanda, cómo mas blanda se pone, mas me ofusco y mas me cuesta poder correrme.

• Te jode la presión, eh? Jajajajjaja

En mi cara empieza a verse el sufrimiento, me doy cuenta por el espejo que tengo justo delante, y él también se da cuenta.

• Que pasa perrete?

• Me duele mucho el cordón, señor, lo siento. - Mi Amo es bueno y me lo quita.

• Apresúrate, te queda poco tiempo.

Sigo pajeándome, pero la polla está muy flácida ahora. Apenas cuando consigo ponerla dura de nuevo, me enseña el cronómetro que ya ha finalizado y:

• Para! Ya sabes lo que te toca...- Me hace levantar, poner las manos atrás, las ata con una cuerda y pone una venda en mis ojos- A cuatro patas perro! - Me pongo como me dice sin rechistar, ya he empezado mal la tarde y solo faltaría eso...

• Noto que empieza a acariciar mi culo, presionando suavemente con un dedo mi ano.

• Relájate perrete, tienes un pie al lado de la cara, ya sabes que tienes que hacer. - Giro la cara y empiezo a lamer el pie. Mientras me concentro en ello, él aprovecha para trabajarme el culo, poco a poco, con un dedo. Lo mete entero, gimo de dolor y placer mezclado, tengo mi Amo dentro del culo, aunque sea su dedo. Esa idea se apodera de mi y me relajo por completo e intento disfrutar al máximo ese momento. Lo saca suavemente y lo vuelve a meter, me folla con el dedo hasta que lo saca del todo, coge un dildo y lo intenta meter, poco a poco, con suavidad, me cuesta muchísimo, me relajo lamiendo su pie, y aprovecha para seguir metiéndolo, hasta que lo mete entero y me folla suavemente con él. La mezcla de placer y dolor es demasiado grande y le suplico que pare. Lo suelta, pero sigue dentro mío. Intento sacarlo pero no soy capaz. Me folla un poquito más, le vuelvo a suplicar y ahora si que lo puedo expulsar.

• Muy bien perrete, ves como no era tan difícil?

• Si señor, gracias señor. - Me desata las manos y me dice:

• Bueno perrete, tengo trabajo que hacer, ya sabes lo que tienes que hacer.- Me meto debajo la mesa para lamerle los pies. Suave y ricamente le lamo los pies mientras trabaja con su ordenador. Esta vez no me reprimo y me doy el placer de acariciar ampliamente sus piernas y su polla, que rica polla, aunque esté morcillona es preciosa.

• En posición. - Me pongo en medio de la habitación de rodillas, pongo mi camiseta al suelo, justo delante y las manos atrás.- Muy bien perrete.- Y otra larga y tendida meada va en mi boca y, de allí, directo a mi estómago. Cuando noto que ya ha acabado empiezo a disfrutarla con una buena mamada, gozando del gusto de su polla en mi garganta.

• Buen perrete, ponte en cuatro. Venga, toma, métetelo, tienes todo el tiempo que quieras, yo tengo que trabajar, cuando esté todo dentro, me avisas. - Me da el dildo de antes, me pongo en cuatro apoyando el pecho en la cama y empiezo a metérmelo. Como me tiene a mil es fácil entrarlo hasta el fondo.

• Ya está dentro, señor.

• Muy buen perro, ves, no es tan difícil como decías. Fóllate! - Al hacer eso me duele mogollón, grito y me veo obligado a parar. - He dicho que pares? Puedes hacerlo suave o fuerte, tu mismo.- Intento volver a hacerlo, mas suavemente, pero sigue doliendo y mi culo lo expulsa.

• Dentro perro he dicho.- Lo meto dentro otra vez, se pone de rodillas detrás mío. - Quieres que te folle?- En mi se abre un mundo nuevo. Claro que quiero que me folle, pero su gordo pollón no sé si voy a ser capaz de aguantarlo. Antes de decir nada añade. - Con el dildo, eh, no con mi polla.

• Gracias señor. - Instala su polla en mi perineo y empieza a follarme. En cada embestida el dildo que tengo en el culo me va follando, mientras que su polla, que como dije anteriormente está ligeramente inclinada hacia arriba, se me clava en el perineo dándome un enorme placer por ambos lados.

Me quita el dildo y suavemente va introduciendo su polla en mi culo. El placer de notar su polla en mi culo me abruma, es superior a mi, no sé si ha logrado meterla toda, pero me siento lleno de mi Amo, empieza a follarme suavemente, no soy capaz de aguantar tanto placer. Le ruego que la quite, pero se queda inmóvil, sin hacer nada, dentro, para que me relaje. Respiro hondo y sin esperármelo empieza a hacer fuerza en la polla, sin moverla. Me coge un nosequé que no puedo y me la saco como puedo.

• Bien, perrete. Ves, ya te ha follado tu Amo. Como te sientes?

• Muy bien señor, contento de lo que ha hecho señor. Gracias señor.

• Bien perrete, en posición.- Pronto me pongo en la posición y otra larga y tendida meada va directa a mi interior. No sé de dónde saca tanto meo ese tío. A media meada me empiezo a marear, la situación me está sobrepasando, pero no sé cómo pararlo, ahora mismo, si me aparto, lo dejaré todo perdido de sus meos... Al terminar la meada con su pie presiona mi polla y mi barriga. Con eso mi mal estar va a pero y se lo hago saber.

• Tranquilo perrete, estoy aquí para cuidarte.- Me da aire, me tranquiliza y me da mimos. Que bien, mi Amo cabroncete me está cuidando, no es que me sorprenda, ya que de siempre me ha parecido un buen chico, pero sí que me gusta ver esa reacción por su parte.

• Quieres irte perrete? Lo entenderé perfectamente si lo haces. - Me dice en tono cariñoso.

• No señor.

• Tranquilo perrete, yo te cuido, ya lo ves. Recupérate.- Y vuelve a su trabajo.

En poco tiempo me recupero y vuelvo a mi sitio, bajo su mesa a lamer sus pies. Allí tumbado boca arriba con sus pies en la boca, admirando su cuerpo, el collar me ahoga. La gravedad hace su trabajo y presiona mi cuello, es muy estrecho y no hay margen como para ponerlo de forma que no me moleste, pero sigo allí, lamiendo sus pies, acariciando sus piernas y masajeando su polla. Masajeo su polla flácida sin cesar hasta que esta se pone dura otra vez.

• Venga perrete, que veo que te mueres de ganas! Cómemela!- Y dicho y hecho, me pongo a mamarla sin cesar.- Quieres mi leche perrete?

• Me encantaría señor.

• Córrete. Si lo haces te marcaré toda la cara.

El empieza a masturbarse y yo también. Mientras me hace comerle los huevos, pero no de uno en uno como estoy acostumbrado, sino los dos a la vez. Pone sus dos huevones en mi boca y me hace tirar de ellos mientras noto el zambombido de su polla en mi cara. Temo por no hacerle daño, los huevos son grandes y al tirar de ellos con la boca se me escapan. Temo presionar demasiado para que no se escapen y hacerle daño.

Me tumba en el suelo y desde allí tengo una vista privilegiada de como se pajea, ya que él, sentado en la silla y pajeándose, me queda justo encima de la cabeza. De vez en cuando va soltando un chorro de precum directo en mi boca, dulce y sabroso. Nunca en mi vida vi salir el precum de esa forma, siempre había visto la típica gotita en la punta de la polla, pero no salir un chorro disparado... mmmmmm, que rico que está!

• Quieres mi lefa, perrete?

• Sí señor, gracias, señor.

• En cuanto te corras te pringo bien la cara.

• Gracias señor.

Me concentro para correrme, pero como mas me concentro menos lo consigo, hace nada que me corrí y no soy una persona de correrme mucho yo, de hecho, no necesito correrme para pasarlo bien... Así que, mi Amo, harto de ver que no lo consigo, se sienta en la cama y empieza a masturbarme él. No sé como coño lo hace pero las sensaciones son miles, me masturba de tal forma que noto un placer jamás experimentado con una paja... Me tiene así mucho rato, le suplico que pare, que no lo aguanto, pero el sigue, evidentemente.

• Te vas a correr, perrete? Ya ves que no tengo prisa, te podría atar en la cama y pasarme así toda la noche.- Ufff! que morbo de situación, aunque no sé si lo podría aguantar...

Se levanta, se agacha encima mi cabeza y me vuelve a obsequiar con otro chorro de precum directo a mi boca, uffff..... como me pone... Mete su polla en mi boca y la saboreo sin cesar mientras tengo unas vistas espectaculares de su culo que no dudo en acariciar y masajear con las manos... Noto que mi lefa está a punto de venir y gimo para que se dé cuenta de ello, pone las manos para recoger mi lefa al correrme y me la echa directa en la boca, para que la saboree bien. Coge mi camiseta del suelo se limpia bien las manos con ella y dice:

• En posición perrete.- Me pongo en ella aprisa, esperando lo que me ha prometido, pero en vez de eso me da otra larga y tendida meada directa a mi estómago. Y mi premio? me pregunto yo... No lo habré hecho lo suficientemente bien...

• Muy bien perrete, ya hemos terminado por hoy. Ves cómo conmigo se pueden aprender muchas cosas? Vas por buen camino perrete, te haré mío- Coge la llave del collar, me lo quita, se limpia bien todo el cuerpo con mi camiseta, apurando todas las gotas que hay en su polla y me la arroja. - Vístete, ahora vuelvo, date prisa.

• Si señor.- Me apresuro a hacerlo para que no me encuentre a medias cuando vuelva, pero tarda un buen rato. Le espero de pie, para poder salir rápido cuando me venga a buscar, total, la sesión ya ha terminado por lo que me ha dicho...

• Que coño haces de pie, perro? Al suelo.

• Si señor. Lo siento señor. - No entiendo nada pero obedezco. Saca su polla y otra meada. Estoy flipando. Como coño saca tanto meo mi Amo? Termina de mear, abre la puerta y me despide. Otra vez me he quedado sin gozar de su semen...